(M&T)-. El déficit habitacional podría convertirse en una oportunidad de reactivar la economía en los países emergentes, además de ser una solución para reducir el impacto del Covid-19 en la salud de las poblaciones más vulnerables.
Así se desprende del estudio Cornerstone of Recovery: How Housing Can Help Emerging Market Economies Rebound from COVID-19 elaborado por el Centro Terwilliger de Innovación en Vivienda de Hábitat para la Humanidad.
Detallaron que se estima que mundialmente 1.600 millones de personas viven en casas sin condiciones habitables, incluyendo a los cerca de mil millones que viven en asentamientos informales. A esta situación se suman casi 2.2 mil millones de personas que viven sin contar con buen saneamiento.
El estudio realizado por el Centro Terwilliger analizó datos de vivienda en once países emergentes entre ellos Brasil, India, México y Perú, y determinó que las estadísticas podrían subestimar el impacto real de la vivienda informal, y cómo, por medio de políticas públicas y privadas este sector podría brindar beneficios económicos inmediatos y a la vez abordar necesidades urgentes de salud pública.
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Por sí sola la vivienda informal, que son aquellas construcciones que se dan en asentamientos sin permisos de propiedad, contribuirían entre un 1,5 % y 2,8 % adicional al PIB, si se contabiliza adecuadamente. Esto significa que la vivienda podría contribuir aún más al PIB (hasta un 21,8 % en los países estudiados).
De acuerdo con el informe, con solo contabilizar el 50 % del sector informal, se estaría aumentando la contribución de la vivienda al PIB del 13,1 % al 14,6 %.
Proyecciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), y la Organización de Naciones Unidas (ONU) revelan que un 40% de la población total de Latinoamérica carece de una vivienda y un sistema de saneamiento adecuado.
El estudio además señaló que la aplicación de nuevos métodos de micro financiamiento para personas de bajos recursos, permitiría la reactivación de la economía y apoyaría al mejoramiento de la vivienda en un sector de la población muy vulnerable.
Hábitat para la Humanidad Internacional trabaja por mitigar la problemática de vivienda en América Latina y el Caribe. En 2020 la organización realizó 23,315 nuevas construcciones, 22,690 construcciones graduales y 44,660 reparaciones de viviendas en toda la región.
Desde el 17 y hasta el 21 de mayo se lleva a cabo el IV Foro Latinoamericano y del Caribe de Vivienda y Hábitat, evento que reúne a organizaciones como ONU-Hábitat, CEPAL y el Banco Centroamericano de Integración Económica; además de gobiernos y organizaciones no gubernamentales para trabajar en acciones conjuntas que detengan la pandemia y la pobreza en estos países, que según advierte CEPAL, para este año podrían crearse más de 22 mil nuevos pobres en Latinoamérica.
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