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M&T)-. Scotiabank es el banco canadiense con mayor presencia internacional y brinda servicios a cerca de 19 millones de clientes en más de 55 países del mundo, en América, El Caribe, Europa y Asia.
Inspirado en su propósito corporativo, “por nuestro futuro”, la entidad financiera tiene como meta principal ayudar a sus clientes, sus familias y sus comunidades a lograr el éxito a través de una completa gama de asesoría, productos y servicios en los sectores de banca personal y comercial, gestión patrimonial, banca privada, corporativa y de inversión, y mercados de capital.
En abril recién pasado, Scotiabank anunció que Robert Williams fue nombrado Vicepresidente Sénior para Centroamérica y CEO de Scotiabank Costa Rica. Ingeniero de profesión, respaldado por 16 años de experiencia en la banca y descrito como un líder enfocado en los resultados, el directivo previamente ocupó el puesto de CEO y Country Head de Scotiabank en Panamá y en la República Dominicana y desde octu-re de 2018 asumió como Vicepresidente Sénior, Banca Corporativa y Comercial de la división de Banca Internacional de Scotiabank, con sede en Canadá. Y ahora, desde su cargo regional, está más que nunca enfocado en seguir fortaleciendo el negocio en Costa Rica y Panamá. Y es precisamente Williams quien conversa con Mercados & Tendencias para dar más detalles sobre su nuevo nombramiento así como los planes que la entidad financiera tiene.
¿Con qué retos llega su nuevo nombramiento?
El reto más grande que veo es lograr el crecimiento de nuestra franquicia en la región. Vengo con un gran ímpetu de crecer. Scotiabank en Centroamérica, específicamente en Costa Rica y Panamá, tiene 5 años de estar enfocado con un sesgo interno, porque venimos saliendo de una integración larga de adquisición de Citibank, en 2015, con una duración de 3 años.
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Nosotros hemos hecho miles de integraciones, hemos adquirido muchas franquicias a lo largo de los años, y típicamente éstas duran entre 12 y 18 meses. En el caso de Citibank duró 36 meses, o sea que fue una integración larga y compleja. Por si fuera poco, saliendo de eso nos impacta una pandemia que nos obliga a reenfocar todo para adaptarnos a la coyuntura y a la situación económica de nuestros clientes y definir cómo podemos ayudarlos a sobrellevar la crisis.
Entonces recibo un banco que por los últimos 5 años ha estado con cierto sesgo interno, pero que ahora tiene mucha posibilidad de crecer. Nuestro enfoque está en servir a nuestro cliente con más pasión y crecer nuestro negocio de manera orgánica. Me siento muy confiado que lo vamos a poder lograr porque el equipo ejecutivo de Scotiabank en la región es maduro, profesional y con la más basta experiencia bancaria.
¿Qué metas se ha planteado en su nuevo puesto?
Tenemos múltiples ejes de acción estratégicos. Uno de ellos es la transformación digital, la cual definitivamente es una prioridad para nosotros. El otro es generar ese crecimiento orgánico sobre la base de un crecimiento sostenido de los ingresos, y eso solo viene con una mejora en nuestras propuestas de valor de nuestros productos para captar mayor mercado y para asegurarnos que los clientes que ya tenemos no se vayan. Asimismo, el manejo adecuado del riesgo, que es algo que Scotiabank sabe hacer muy bien.
Somos parte de una franquicia multinacional con más de 200 años de existencia; en Panamá tenemos cerca de 47 años, mientras que en Costa Rica tenemos cerca de 27 años. Somos un banco que hemos visto muchos ciclos económicos y hemos sido testigos de muchas crisis y hemos logrado sobrevivir. Y finalmente, otro eje, es ser un buen ciudadano corporativo, a través de la Responsabilidad Social Corporativa, no solo al ser un actor económico responsable que busca apoyar a sus clientes, sino cumplir el objetivo de regresarle a las comunidades algo de lo que nos han dado.
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