La actividad turística, uno de los pilares de la economía costarricense, atraviesa un momento delicado. En zonas como Garabito, donde el turismo representa una fuente clave de ingresos, la baja en la llegada de visitantes nacionales e internacionales ha encendido las alarmas del sector.
(M&T)-. La Cámara de Turismo y Comercio Sostenible de Garabito (CATUCOSO) expresó su preocupación por la ausencia de estrategias efectivas y por la falta de reconocimiento de factores internos que han contribuido a esta desaceleración. La entidad señala que la inseguridad, el alto costo de los servicios y la débil promoción internacional han debilitado seriamente la competitividad del destino.
Tendencia a la baja y efectos visibles en la región
Datos del Instituto Costarricense de Turismo (ICT) revelan que desde septiembre de 2024 la visitación extranjera ha experimentado una caída interanual de hasta un 5,91%. En febrero de este año, la tendencia se mantuvo a la baja, golpeando especialmente a localidades como Jacó, donde la demanda turística ha disminuido de forma notoria.
A este panorama se suma el aumento de viajes al exterior por parte de los costarricenses, quienes están optando por destinos como Guatemala, atraídos por ofertas más económicas y atractivos accesibles. Además, la reducción de asientos disponibles en vuelos hacia Costa Rica, la apreciación del colón frente al dólar y el incremento del IVA han encarecido los servicios turísticos, restando competitividad frente a otros países de la región.
“Quienes vivimos del turismo hemos percibido claramente esta disminución, y si bien hay factores globales que inciden, también existen decisiones locales que han influido negativamente, y es urgente reconocerlas para corregir el rumbo”, señaló Juan Carlos Chávez, presidente de CATUCOSO.
Llamado a una respuesta conjunta y estratégica
Desde la Cámara se identifican varios puntos críticos. Entre ellos, la escasa presencia en mercados internacionales, la falta de incentivos al turismo nacional y la desconexión entre el gobierno y el sector privado, lo cual impide una gestión integral de las necesidades del sector.
El gremio propone una serie de acciones urgentes:
Reactivar campañas de promoción turística que destaquen los atractivos culturales y naturales del país.
Fortalecer la seguridad turística mediante tecnología, mayor presencia policial y planes de protección al visitante.
Impulsar eventos de gran impacto que atraigan turismo internacional y reactiven la economía local.
Establecer incentivos al turismo interno, facilitando que más costarricenses redescubran los destinos nacionales.
Pese a la situación, desde la Cámara se reconoce que Costa Rica mantiene un gran potencial turístico. Sin embargo, para aprovecharlo, es vital actuar de forma coordinada.
“Es momento de trabajar juntos en una estrategia de reactivación real y eficaz, escuchando a quienes están en el territorio y conocen de primera mano lo que está ocurriendo”, concluyó Chávez.
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