República Dominicana logró cerrar el año 2020, de forma preliminar, con un déficit fiscal que equivale a un 7.7% del Producto Interno Bruto (PIB), versus al presupuestado que era de 9.3 %, lo que en términos absolutos significa una reducción de RD$77,000 millones de pesos (unos US$1,320.75 millones.
El presidente Luis Abinader resaltó que la reducción fue posible debido al manejo proactivo tanto de las recaudaciones, como consecuencia de la reactivación económica del último trimestre de 2020, así como el control y focalización del gasto público. Además, se detalló que que las recaudaciones también cerraron el año con un 3.75 % por encima de lo estimado.
El mandatario aseguró que la priorización y control del gasto público permitió que en 2020 el mismo ascendiera a RD$978,000 millones (US$1,6775.30), para una reducción preliminar con relación al monto presupuestado de RD$54,000 millones (US$926.24 millones).
Aseguró que la reducción del gasto no impactó las prioridades del Gobierno, las que fueron establecidas de manera clara en el presupuesto aprobado a principios de septiembre.
El presidente expresó que “pudimos aumentar las partidas destinadas a la salud en RD$15,000 millones de pesos (US$257.29 millones), educación en RD$10,000 millones (US$171.53 millones), agua potable en RD$3,200 (US$54.89 millones), vivienda en RD$4,600 millones (US$78.90 millones), seguridad ciudadana en RD$2,800 millones (US$48.03 millones) y protección social en RD$100,000 millones de pesos (US$1715.27 millones)”.
Asimismo, recordó que se extendieron los programas de apoyo a la población vulnerable durante la pandemia y se prepararon las escuelas para un año escolar virtual. También informó que también se dotó al sector salud de los recursos necesarios para garantizar la atención sanitaria, acción que incluye la inversión requerida para afiliar a dos millones de personas en el Seguro Nacional de Salud (SeNaSa).
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El mandatario resaltó que en el área cambiaria se ha logrado mantener la estabilidad del tipo de cambio en los últimos cuatro meses, permitiendo al Banco Central aumentar las reservas internacionales de US$6,700 millones a US$10,600 millones, lo cual ha garantizado la estabilidad macroeconómica.
“Lo que hemos conseguido hasta ahora nos ha permitido dinamizar la economía del país, sin desatender las necesidades de las personas vulnerables, lo que representa un avance sin precedentes en el proceso de consolidación fiscal del gobierno”.
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