Por: Malka Mekler y Alejandra Ordoñez
Ana Russo, presidenta de Philip Morris International en Centroamérica y Caribe.
La empresa Phillip Morris International lanzó un nuevo dispositivo para la población fumadora el cual fue aprobado por la FDA, se trata del IQOS, el más avanzado hasta el momento, este se encarga de calentar el tabaco en vez de quemarlo. El objetivo es contribuir a lograr que más de 40 millones de fumadores adultos se cambien a productos libres de humo para el año 2025.
IQOS está disponible en seis mercados de Latinoamérica y cuatro de ellos están en Centroamérica y Caribe (Caricam incluyendo: Guatemala, Curazao, República Dominicana y recientemente Costa Rica. Teniendo en cuenta esto, más de 22.000 fumadores adultos ya son usuarios de IQOS en la región de Caricam.
Estos productos eléctricos son una mejor opción que los cigarrillos, siendo IQOS un ejemplo de ello, ya que emite en promedio 95% menos niveles de componentes nocivos, en comparación con el humo del cigarrillo.
“Nuestro objetivo es muy simple: reemplazar los cigarrillos por productos libres de humo. Nuestra misión es ofrecer mejores alternativas para aquellos fumadores adultos que de lo contrario continuarán fumando cigarrillos. Esta es nuestra visión global, pero va a tomar tiempo y no podemos hacerlo solos, pero hacia allá vamos. No hay vuelta atrás”, explicó Ana Russo, presidenta de Philip Morris International en Centroamérica y Caribe.
La empresa se encuentra en un proceso de transformación sin precedentes, de ser fabricantes de cigarrillos a ser una empresa basada en la innovación, ciencia y tecnología. Dicha estrategia se ha implementado desde el 2008 y ha generado grandes cambios, para la misma se ha invertido alrededor de US$7,2 millones en investigación y desarrollo de nuevos dispositivos sin humo, así como obtener 4.600 patentes para la creación del nuevo portafolio de productos de riesgo reducido.
Los dispositivos IQOS cuentan con la tecnología HeatControl™ la cual se basa en garantizar el calentamiento uniforme de las unidades de tabaco, llegando a una temperatura máxima de 350°C, evitando la combustión. Estos trabajan por medio del uso de consumibles llamados HEETS y el proceso de calentamiento de los HEETS crean un vapor que contiene nicotina, con niveles mucho menores de otros componentes dañinos en comparación con el humo del cigarrillo tradicional.
La principal diferencia entre los cigarrillos y los dispositivos de tabaco calentado es que los cigarrillos tienen tabaco y generan humo lo cual provoca que las sustancias irritantes y cancerígenas del tabaco pasen al pulmón. En cambio los dispositivos evitan la combustión y así eliminan la ceniza y el humo, esta ausencia de combustión permite consumir nicotina disminuyendo hasta 95% los daños comparados al cigarrillo común.
Russo agrega que más de 22.000 fumadores adultos en Centroamérica y el Caribe ya han optado por esta nueva alternativa. “Estamos comprometidos en hacer realidad nuestra visión de un futuro libre de humo de cigarrillos.
Asimismo, Russo indicó que su mayor reto en este momento es entablar el diálogo abierto y necesarios con los reguladores y expertos de salud, con el fin de fomentar una conversación basada en evidencia científica que permita a los fumadores adultos tener acceso a mejores opciones.
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