(M&T)-. Esta nueva aplicación le permite a los usuarios registrar los sangrados por ubicación corporal, monitorear el suministro de factores de coagulación VIII o IX, registrar las infusiones rápido y fácilmente, generar informes para compartir con su equipo de tratamiento y configurar recordatorios para actividades importantes, como citas médicas, entre otras funciones.
“Llevar innovaciones que cambien la vida de los pacientes es nuestro propósito principal; sin embargo, este va más allá de tratamientos. Gracias a los avances en la ciencia y tecnología, en Pfizer también nos enfocamos en desarrollar herramientas que le faciliten al paciente el control de su enfermedad, tal es el caso de HemMobile CAC. Con esta nueva aplicación, buscamos apoyar a las personas con hemofilia en la estricta vigilancia de sus episodios de sangrado e infusiones, con el fin de que puedan medir si el tratamiento recibido es el más adecuado. Es una sola app en la que el paciente puede tener toda la información importante de su caso, con miras a sus consultas médicas”, explicó la Dra. Montserrat Alfaro, gerente médico de Pfizer Centroamérica y Caribe (CAC).
Le puede interesar La necesidad del autocuidado de la salud
HemMobile CAC es una aplicación totalmente gratuita y está disponible para usuarios con dispositivos celulares o tabletas, tanto desde App Store como Google Play. La información personal proporcionada por los pacientes o sus cuidadores es privada y se almacena únicamente en el dispositivo, con excepción del correo electrónico, en caso de que el usuario olvide su contraseña y desee generar una nueva. La finalidad de HemMobile CAC no es diagnosticar, tratar, curar ni prevenir ninguna enfermedad y no deberá utilizarse como sustituto del criterio, asesoramiento, diagnóstico o tratamiento médico de cualquier enfermedad o problema de salud.
¿Hemoglobina?
La hemofilia es una enfermedad mayormente hereditaria ligada al cromosoma X y más padecida por los hombres, en la que la sangre no coagula de manera adecuada y los pacientes presentan sangrados por periodos más prolongados de lo habitual. A raíz de lo anterior, este trastorno requiere un riguroso registro de episodios de sangrado, actividad física y la administración del tratamiento indicado para colaborar con el equipo médico respectivo.
En su más reciente estudio sobre la prevalencia de la enfermedad al año 2019, basado en una prevalencia al nacer de 25 por cada 100 mil varones nacidos, la Federación Mundial de Hemofilia (WFH, por sus siglas en inglés) estima que a nivel global hay cerca de 1.125.000 hombres con la enfermedad, de los cuales alrededor de 418 mil la padecen de forma severa. Datos de esta misma entidad indican que solo en Guatemala existen aproximadamente 327 personas con hemofilia.
Existen dos tipos de hemofilia. La más frecuente es la hemofilia A, que se caracteriza porque la persona tiene niveles disminuidos de factor VIII de coagulación o está ausente. Por su parte, la hemofilia B se da cuando el factor IX de coagulación está ausente o en concentración baja. En ambos casos, las personas tienden a sangrar por un periodo más prolongado de lo normal.
Los pacientes suelen experimentar sangrados a lo interno o externo del cuerpo, más frecuentemente en las articulaciones (afectando mayoritariamente las rodillas, los codos y los tobillos), debajo de la piel (generando moretones), así como en los músculos y tejidos blandos. También, se dan sangrados en la boca, encías, nariz, luego de recibir inyecciones y hasta en la orina y/o las heces.
Comentarios