El país caribeño está inmerso en una discusión sobre cómo controlar los atropellos en el espectro digital.
(M&T)-. En la República Dominicana, la libertad de expresión es un derecho fundamental consagrado en el artículo 49 de la Constitución, que garantiza a los ciudadanos la facultad de expresar sus ideas sin censura previa. Sin embargo, este derecho no es absoluto y está sujeto a limitaciones legales destinadas a proteger la reputación y los derechos de los demás, así como el orden público y la moral. En el contexto de los medios digitales, ha surgido un intenso debate sobre la necesidad de regular el discurso en línea para combatir la difamación, la injuria, el insulto y la vulgaridad.
El Poder Ejecutivo ha propuesto un proyecto de ley que busca regular la libertad de expresión en todas sus manifestaciones, incluyendo los medios audiovisuales y las plataformas digitales. Según Antoliano Peralta, consultor jurídico del Poder Ejecutivo, esta iniciativa pretende resguardar los derechos conexos a la comunicación social y el periodismo, estableciendo procedimientos administrativos y jurisdiccionales para la protección de todas las partes involucradas. El objetivo es unificar criterios en torno a la regulación legislativa de la libertad de expresión, adaptándola al marco constitucional vigente y a las nuevas realidades digitales.
Los defensores de esta regulación argumentan que, en la era digital, la información se difunde de manera instantánea y masiva, lo que amplifica el potencial daño de contenidos difamatorios o injuriosos.
Ellos consideran que establecer un marco legal claro es esencial para proteger la dignidad y los derechos de las personas, así como para mantener el orden público. Además, sostienen que la regulación podría servir como herramienta para combatir la propagación de noticias falsas y discursos de odio que proliferan en las redes sociales y otras plataformas digitales.
Por otro lado, críticos de la propuesta advierten que una regulación excesiva podría poner en riesgo la libertad de expresión y conducir a formas de censura. Señalan que, aunque es necesario abordar los abusos en línea, las medidas propuestas deben ser cuidadosamente equilibradas para no restringir indebidamente el derecho a expresarse libremente.
Algunos expertos sugieren que, en lugar de imponer restricciones amplias, se deberían fortalecer los mecanismos existentes para perseguir legalmente casos específicos de difamación o injuria, garantizando al mismo tiempo la protección de los derechos fundamentales.
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión (RELE) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha señalado que, aunque países como República Dominicana mantienen garantías a la libertad de expresión, persisten desafíos en la región. El informe anual de 2021 destaca la necesidad de equilibrar la protección de este derecho con la implementación de medidas que prevengan abusos y protejan a las personas de ataques a su reputación y dignidad.
El debate sobre la regulación del discurso en los medios digitales en República Dominicana refleja la tensión entre proteger la libertad de expresión y garantizar el respeto a la dignidad y los derechos de las personas.
Mientras algunos abogan por una regulación que combata eficazmente la difamación y otros abusos en línea, otros alertan sobre los riesgos de censura y la necesidad de salvaguardar el derecho fundamental a expresarse libremente. Encontrar un equilibrio adecuado será crucial para fortalecer la democracia y el respeto a los derechos humanos en el país.
Comentarios