(M&T)-. Endeavor y PepsiCo sumaron esfuerzos para elaborar un estudio sobre el panorama de las FoodTech en la región con el fin de contribuir al desarrollo sostenible de los sistemas alimentarios y fomentar el desarrollo económico de América Latina, brindar herramientas de análisis de las tendencias en el sector.
En este informe fueron identificadas más de 300 startups y scaleups quienes, a través de más de 100 encuestas y alrededor de 20 entrevistas con sus ejecutivos, reiteraron que la implementación de tecnologías en las empresas vinculadas al sector alimenticio es fundamental para poder innovar en la cadena de valor de los sistemas alimentarios actuales desde una visión sostenible.
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“La tecnología ha penetrado múltiples sectores y alimentos no es la excepción. A nivel mundial se viven grandes desafíos a lo largo de la cadena de valor de alimentos, buscando generar mayores eficiencias que al mismo tiempo sean sensibles con el medio ambiente y con los cambios de hábito de consumo. La región de Latinoamérica tiene el potencial de convertirse en un prominente hub de FoodTech con más de 300 startups y scaleups que están reinventando la forma en que consumimos los alimentos, sus empaques, transportación, logística, su forma de comercializarlos y distribuirlos, generando disrupción en cada eslabón” Enrico Robles Del Rio, Director de Inteligencia en Endeavor.
El panorama que brinda este informe pretende inspirar a los actores del sector para aprovechar las oportunidades emergentes y establecer colaboraciones con sus pares u otros actores del ecosistema como son emprendedores, inversionistas, aceleradoras y fondos de inversión. Tan solo hoy estas empresas generan más de 29 mil empleos directos y, de 2011 a la fecha, han recaudado US$1,700 millones en capital de riesgo, 64% de los cuales, sucedió en los últimos 2 años, es decir, durante los mayores picos de la pandemia por Covid-19.
Entre los hallazgos principales del estudio destaca que las tres categorías con mayor representación dentro de la muestra corresponden a empresas de logística y gestión de datos en 22%, ventas en 17% y productos orgánicos, naturales o saludables en 16%; de las cuales, 24% lograron escalar y generar 50 o más empleos directos, pese a tener menos de una década en operación.
“En PepsiCo recientemente anunciamos PepsiCo Positive, una estrategia de transformación de punta a punta que cambiará la forma en que obtenemos los recursos para producir y comercializar nuestros productos, con la sustentabilidad y el capital humano en el centro. Estamos comprometidos con el desarrollo del ecosistema emprendedor en todo el mundo y estamos convencidos de que en Latinoamérica podremos hacer frente a los retos actuales y sumarnos en la construcción de comunidades más fuertes y un sistema alimentario más sustentable. Trabajamos de la mano con emprendedores que operan en los espacios FoodTech, distribución y sostenibilidad con el fin de identificar avenidas de crecimiento para la empresa y las comunidades donde operamos”, señaló Ricardo Arias-Nath, Vicepresidente Sr. de Transformación y Estrategia de PepsiCo Latinoamérica.
Derivado de este estudio se encontró que 26% de los emprendimientos FoodTech de la muestra han experimentado expansión internacional, siendo Estados Unidos, México y Brasil, los tres destinos más populares para abrir fronteras, este crecimiento proviene 52% de empresas de origen chileno y 49% de Argentina.
Cabe señalar que en 24 de las empresas B2C que participaron en el estudio, dentro de las categorías de comercio electrónico y mercados, nuevos alimentos y productos orgánicos, naturales o saludables, las compañías han logrado constituir una comunidad total de más de 1 millón de usuarios y, de enero 2019 a junio de 2021, publicaron más de 97 mil unidades de contenido, incluyendo “publicaciones” e “historias” en redes sociales, conectando con sus audiencias mediante canales, dinámicas e información cercana a sus seguidores, dando muestra de su capacidad innovadora y de mantenerse a la vanguardia respecto a tendencias de consumo.
“Los resultados de este estudio son un reflejo de la importancia que ha adquirido la tecnología y es un llamado para proponer nuevas opciones que nos permitan producir, empacar, transportar, distribuir, comercializar y consumir alimentos de forma distinta a lo tradicional, generando un impacto positivo en las personas y el planeta, finalizó Arias-Nath.
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