El Salvador se prepara para adoptar las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) de sostenibilidad, marcando un avance significativo en la transparencia y comparabilidad de los informes financieros relacionados con la sostenibilidad.
(M&T)-. Este cambio promete beneficios sustanciales para las organizaciones al mejorar la comunicación en el mercado financiero y fomentar un crecimiento económico más sostenible.
Edna Camacho, Gerente Senior de Sostenibilidad en EY, enfatiza la importancia de implementar las NIIF para mejorar la transparencia y la comparabilidad en los informes financieros. Para una adopción efectiva, se recomienda seguir cuatro etapas clave:
Análisis de Brechas: Evaluar la situación actual de la organización en relación con los estándares NIIF para determinar la preparación y las áreas que necesitan mejoras.
Adopción de Medidas de Transición: Capacitar al personal clave y designar un equipo responsable para asegurar una transición fluida. Las medidas de transición durante el primer año son cruciales.
Materialidad Financiera: Divulgar solo la información de sostenibilidad relevante que afecta el desempeño financiero, flujo de efectivo o posición financiera de la organización.
Aplicación de Normas: Monitorear continuamente y ajustar según sea necesario para garantizar el cumplimiento y la mejora constante de la calidad de la información financiera relacionada con la sostenibilidad.
La implementación de estas normas ayudará a las empresas a gestionar la transición, mejorando la calidad y comparabilidad de la información financiera relacionada con la sostenibilidad y fortaleciendo la confianza entre inversores, acreedores y otros proveedores de fondos.
Hasta la fecha, se han emitido dos normas NIIF de divulgación de sostenibilidad: la NIIF S1 y la NIIF S2, con expectativas de futuras ampliaciones.
EY participó en el primer foro sobre estas normas en entidades financieras, organizado en conjunto con SUGEF, SUPEN, SUGEVAL, SUGESE y la oficina en Costa Rica de las Naciones Unidas, destacando la importancia de estas normas para mejorar la transparencia, gestionar riesgos ESG y fortalecer la confianza con inversores y reguladores.