(M&T)-. Los proyectos estuvieron enfocados en los espacios públicos, para apoyar el derecho a la recreación y ciudad de los niños y niñas. Por esta razón, se reconstruyeron o revitalizaron parques infantiles, canchas, áreas de juego, salones de usos múltiples, salones preescolares, mobiliario urbano, entre otros. Gracias a las intervenciones realizadas en espacios públicos, Fundación FEMSA y Glasswing International apoyaron a más de 5 mil personas.
Además, se entregaron kits de bienestar para la primera infancia con materiales didácticos desarrollados en alianza con Sésamo, así como experimentos de ciencia, materiales de arte, libros infantiles, kits de salud mental y atención plena. Gracias a estas iniciativas, recibieron apoyo 2,480 niños y niñas de entre 0 y 6 años y más de 3 mil padres de familia. Se logró impactar en total a más de 2,700 familias de 88 comunidades de la región.
En el caso de Guatemala, el espacio público que se intervino fue la cancha deportiva y el salón de usos múltiples de la colonia Lomas de Villa Lobos, en Zona 12 Villa Nueva. Además, se entregaron kits humanitarios y de bienestar en escuelas parvularias de la zona 11 de la capital y en Villa Nueva.
Todas las intervenciones en espacios públicos de la región se realizaron bajo el enfoque basado en la prevención del crimen a través del diseño ambiental (CPTED, Crime Prevention Through Environmental Design). Asimismo, se contó con un alto compromiso cívico, en un espacio identificado y priorizado por los miembros de la comunidad. Las intervenciones se realizaron en alianza con las comunidades, quienes participaron en diferentes talleres para que los diseños respondieran a sus necesidades.
“En Fundación FEMSA sabemos que el futuro se construye hoy y estamos convencidos que invertir en la primera infancia es una de las mejores maneras de construir sociedades más prósperas, con más justicia e igualdad. Cuando hay más niños y familias en los espacios públicos, nuestras ciudades se convierten en entornos más seguros y saludables para todos”, comentó Eva Fernández, Gerente de Inversión Social en Primera Infancia de Fundación FEMSA.
Con este proyecto, Fundación FEMSA y Glasswing implementaron un modelo de resiliencia comunitaria integrado y basado en el lugar, que aprovecha los recursos y las capacidades preexistentes dentro de las comunidades.
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