Avería en muelle cambia el trayecto de los cruceros en Puerto Rico

Royal Caribbean reubica escala del Icon of the Seas de San Juan a Ponce debido al cierre del Muelle 3 Oeste.

(M&T)-. La industria de cruceros en Puerto Rico enfrenta un nuevo desafío con el reciente anuncio de Royal Caribbean de modificar la ruta de su emblemático crucero, el Icon of the Seas. Originalmente programado para atracar en el puerto de San Juan, la compañía ha decidido trasladar esta escala al puerto de Ponce.

Esta decisión se debe al cierre indefinido del Muelle 3 Oeste en San Juan, clausurado desde abril de 2024 tras el colapso de una estructura de amarre. La Guardia Costera de Estados Unidos ha mantenido la prohibición de operaciones de cruceros en dicho muelle hasta que se realicen las evaluaciones necesarias para garantizar su integridad estructural.

El Icon of the Seas es conocido por ser uno de los cruceros más grandes y modernos de la flota de Royal Caribbean. Esta reubicación representa una oportunidad significativa para la región sur de Puerto Rico, ya que se anticipa un impacto económico positivo derivado de la afluencia de turistas y tripulantes que visitarán la ciudad.

No obstante, la ausencia temporal de cruceros de gran envergadura en San Juan podría afectar la economía local, especialmente a los comercios y servicios que dependen del flujo constante de visitantes. Según datos de la Compañía de Turismo de Puerto Rico, la llegada de múltiples cruceros en un solo día puede representar una inyección económica de aproximadamente US$1.3 millones para la isla.

A pesar de este contratiempo, las autoridades portuarias y gubernamentales confían en que, una vez concluidas las reparaciones y mejoras en el Muelle 3 Oeste, San Juan retomará su posición como un destino clave para las principales líneas de cruceros. La modernización de las instalaciones portuarias no solo garantizará la seguridad de las operaciones, sino que también permitirá atraer embarcaciones de mayor tamaño y capacidad, lo que se traducirá en un incremento en el número de visitantes y, por ende, en beneficios económicos para la isla.

A nivel global, la industria de cruceros ha experimentado un crecimiento sostenido en las últimas décadas. En 2018, la región del Caribe recibió a 30 millones de cruceristas, representando el 18.7% de los turistas en la zona. Este sector se ha consolidado como una de las principales fuentes de visitantes no residentes en el Caribe insular, impulsando economías locales y generando empleos en diversas áreas, desde servicios turísticos hasta comercio minorista.

En resumen, aunque el cierre del Muelle 3 Oeste en San Juan ha obligado a reconfigurar itinerarios y ha generado desafíos temporales para el turismo en la capital, la adaptación de rutas hacia puertos como el de Ponce demuestra la resiliencia y capacidad de Puerto Rico para ajustarse a las circunstancias. Con la eventual rehabilitación y mejora de las infraestructuras portuarias, se anticipa un resurgimiento robusto del turismo de cruceros en la isla, fortaleciendo su posición en el competitivo mercado caribeño.